|

LA COMUNA Y LA LUCHA PALESTINA

«Lo local condenado solo a lo local, es contra revolucionario» Hugo Chávez.

Por Carlos (Camarada) Rodríguez

El sistema capitalista en su fase imperialista se encuentra en una crisis estructural y sistémica, que amenaza a los pueblos y la vida en el planeta: amenaza con llevarnos a todos y todas a la destrucción. Sin ánimos de sonar fatalista, esa es la realidad.

Este modo de producción (capitalista) basado en la explotación, no cuenta con las formas para evitar las causas de las guerras (conquistas de nuevos mercados y control geopolitico de los recursos) ni para evitar el impacto devastador sobre el ecosistema. Esto ocurre porque como parte de sus principios esenciales, están la maximización de las ganancias y la acumulación del capital en manos privadas.

Tenemos un buen tiempo leyendo sobre estas situaciones y escuchándolas en las noticias, pero hoy podemos verlas con nuestros propios ojos y sentirlas con nuestra propia piel. Observamos el genocidio inhumano que lleva adelante el sionismo israelí contra el noble pueblo palestino, presenciamos las amenazas de las empresas petroleras realizando exploraciones en la fachada atlántica de nuestro territorio Esequibo y a su vez, cómo estos mismos estimulan un posible conflicto militar entre Venezuela y Guyana (este último, amparado por los norteamericanos), sentimos el fenómeno del niño y la niña golpear cada vez más fuerte los ciclos de siembra y a la fauna silvestre, son algunas de las situaciones que ya en la cotidianidad nos impacta y que urgen acciones contundentes de parte de los pueblos.

Este preámbulo es una muestra clara de que estamos en un mundo en crisis y además interconectado, por lo tanto nuestra visión no puede ser localista, si así fuera estaríamos cometiendo un grave error. El Che nos enseñó que: «Si usted es capaz de temblar de indignación cuando se comete una injusticia en cualquier parte del mundo entonces somos compañeros», esa era la visión global del Che Guevara, que lo llevo al Congo y luego a Bolivia,.

Nuestra visión y praxis desde las comunas debe ser amplia, no quedarnos solo en el consejo comunal, hay que producir, gestionar y distribuir, pero además de eso debemos sensibilizarnos, hacernos más humanos y esto pasa sin duda alguna por vincularnos activamente a las luchas de los pueblos, si la opresión es global, nos corresponde globalizar la lucha, como dice la consigna «debemos internacionalizar la esperanza»; pues eso es La Comuna, una esperanza en medio de un mundo que va al abismo llevado de la mano por los intereses de la burguesía mundial, así debemos asumirlo y hacernos conscientes del rol histórico que nos corresponde.

La causa Palestina está ligada a la lucha por la autodeterminacion de los Pueblos -que es un principio para la izquierda- pero de igual forma tiene una profundidad y complejidad por elementos históricos/ geopoliticos, por lo que tal vez no sea un tema que en lo inmediato toque la realidad de nuestro pueblo, es aquí donde los liderazgos juegan un papel clave, para hacer que en Las Comunas se entiendan estos temas, se debatan y además se realicen acciones concretas de solidaridad, protestas de denuncia y de señalamiento a los culpables.

Marx y Engels cierran su manifiesto comunista convocando a la unidad del proletariado, que hoy en día es la unidad de los trabajadores y trabajadoras, de los comuneros y comuneras, no en un país, sino de todos los países, esa es una convocatoria explícita a la unidad de los pueblos.

No perdamos como pueblo la capacidad de indignarnos, de sentir las injusticias y de alzar nuestra voz en solidaridad por los que como nosotros luchan y sueñan con un mundo diferente al que tenemos actualmente, La Comuna debe ser una trinchera de acción territorial con impacto global, un instrumento para la unidad y un espacio para la praxis del internacionalismo.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *