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LA COMUNA Y LA SEMILLA PARA CULTIVAR EL SOCIALISMO.

«Una comuna sin fábrica, sin tierra, sin producción, no es comuna» Hugo Chávez.

Por Carlos (Camarada) Rodríguez

El Comandante Chávez planteo que debemos dar esta lucha en 5 frentes de batalla: el frente social, el moral, el político, el territorial y frente el económico. Precisamente quiero compartir una reflexión en torno al frente económico, pues para conquistar el buen vivir y la suprema felicidad social, es vital la disputa de la economía y de las condiciones materiales de existencia.

A través de la historia, las clases explotadas han luchado por mejores condiciones de vida, lo cual a necesitado ciertos niveles de organización y de conciencia que permitieron consolidar la unidad de diferentes clases o sectores sociales que eran oprimidos por el sistema dominante. Así vemos como de acuerdo a la composición de clases y de las correlaciones de fuerzas, algunas asumen un papel de vanguardia y otras de acompañantes; en la revolución China del Gran Timonel (Mao) el campesinado asumío un papel de vanguardia, en la revolución bolchevique de Volodia (Lenin) fue la clase obrera agrupada en los soviets y en alianza obrero/campesina, en la Revolución cubana la Chispa la prendieron los jóvenes barbudos en la sierra maestra organizados en guerrilla y estos sumaron a las masas campesinas y patriotas.

Todas estas experiencias tienen algo en común, una lectura de la realidad, una línea política clara y correcta (construida por las masas, probada en la realidad) y la unidad de sujetos sociales vinculados a la producción.

Por lo tanto, la comuna no debe prescindir de esto: como instancia de agregación, debe sumar y aglutinar a las fuerzas campesinas y las fuerzas obreras, en un programa común que constituya un gobierno territorial con una mirada de totalidad, pues en estos espacios se expresa la producción y procesamiento de alimentos, de bienes de consumo, servicios, conocimientos, culturas y relaciones.

No podemos caer en el error de asociar a la comuna con lo pequeño, con lo local, o lo que esta por allá lejos, cuando en realidad debemos dotarla de la visión universal y estratégica, así fue como nos la mostró Chávez con el sistema económico Comunal, con el sistema unificado nacional de comunas y con todos los aspectos propuestos en las cinco leyes orgánicas del poder popular.

Es una tarea de primer orden promover, relacionar y amplificar la economía en todas nuestras comunas, tejer redes con las unidades de producción familiar, cooperativas, fundos zamoranos, empresas de propiedad social directas e indirectas!

Este método permitirá generar riqueza e impulsará la reinversión social para dignificar a mujeres, hombres, niñas, niños y adultos mayores. Sólo así podemos garantizar las condiciones para dar nacimiento a la mujer y hombre nuevo que será esa semilla autóctona y certificada del socialismo que aspiramos cultivar, una semilla ancestral con historia de rebeldía, resistente a la alienación tóxica y a la plaga del fetiche de la mercancía.

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